Es un componente (generalmente metálico, con recubrimiento plástico o de material compuesto) que forma parte del sistema de limpieza del parabrisas y contribuye a la seguridad del conductor.

En el exterior del parabrisas y, cuando aplica, en el medallón (cristal trasero).

Mantener despejada la superficie del cristal para asegurar la visibilidad del conductor ante lluvia, granizo, polvo, insectos u otros elementos que dificulten la visión.

Conecta el motor de los limpiadores con las plumas limpiaparabrisas. Mediante un resorte integrado, el brazo ejerce presión constante sobre el cristal y transmite el movimiento oscilatorio para barrer agua y suciedad.

• Presión insuficiente de la pluma sobre el cristal (resorte fatigado).
• Brazo flojo o barrido en la base de montaje.
• Sujeción débil o juego en el adaptador de la pluma al brazo.
• Zonas sin limpiar, vibración o ruido durante el barrido.

• Revisar periódicamente la tensión del resorte y la fijación de la tuerca en la base del brazo.
• Reemplazar el brazo si está doblado/desalineado.
• Mantener libre de hojas, basura u objetos que interfieran con el giro del brazo.
• No operar los limpiadores en seco; utilizar líquido lavaparabrisas y sustituir las plumas cada 6–12 meses según condiciones de uso.